¿Cómo enseñar seguridad laboral a quienes “siempre son nuevos”? Estrategias para capacitar trabajadores con alta rotación

En sectores con alta rotación laboral, enseñar seguridad es un reto constante. Este artículo presenta estrategias prácticas para capacitar a trabajadores que “siempre son nuevos”, promoviendo el aprendizaje activo, la participación y una verdadera cultura del cuidado en el trabajo.

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La realidad de una fuerza laboral cambiante

En muchas organizaciones, la rotación constante del personal se ha convertido en parte del día a día.

Empresas de servicios temporales, minería, construcción o agroindustria enfrentan un reto silencioso: formar continuamente a trabajadores adultos que, en muchos casos, permanecen solo unas semanas o meses en sus puestos.

En este contexto, la capacitación tradicional —extensa, teórica y poco práctica— pierde efectividad. Y lo que está en juego no es solo el cumplimiento normativo, sino la vida y salud de quienes día a día realizan tareas con riesgos reales.

El desafío del aprendizaje adulto

Los adultos aprenden de manera distinta: valoran la experiencia previa, la utilidad inmediata del conocimiento y la aplicación práctica.

Esto lo plantea la teoría andragógica de Malcolm Knowles, y en seguridad laboral cobra un sentido profundo: un trabajador adulto no necesita memorizar una norma, sino entender cómo su comportamiento puede prevenir un accidente.

De allí nace la importancia de diseñar estrategias de formación cortas, visuales y participativas, que se adapten al ritmo operativo del trabajo y al perfil del trabajador.

Estrategias efectivas para capacitar a trabajadores de alta rotación

  • Micro capacitaciones de alto impacto:
    Pequeñas sesiones (tipo charlas de seguridad), enfocadas en un solo tema de riesgo (por ejemplo, manipulación manual, caídas o riesgo químico, etc), realizadas durante reuniones breves, con apoyo de imágenes o videos cortos que capten la atención sobre un “problema” en particular y que los rete a buscar soluciones inmediatas.
  • Entrenamiento en el puesto de trabajo:
    Aplicar la técnica de “enseñar-haciendo” permite que el trabajador asimile directamente el comportamiento seguro en su entorno real, guiado por un supervisor o líder experimentado. Esto le permite al trabajador hacerse responsable de su aprendizaje enfocándose en la solución del problema que al mismo tiempo lo motiva intrínsecamente.
  • Refuerzo conductual y seguimiento diario:
    La supervisión positiva y el reconocimiento de buenas prácticas consolidan los hábitos seguros más rápido que la sanción.
  • Capacitaciones modulares:
    Dividir la formación en módulos breves que puedan completarse en distintos momentos del ciclo laboral, de modo que, si un trabajador se reincorpora o rota, pueda continuar desde donde quedó.
  • Lenguaje inclusivo y herramientas visuales:
    En contextos con diversidad lingüística o educativa, los pictogramas, demostraciones y material gráfico son aliados poderosos para transmitir el mensaje de seguridad.

Normas que respaldan la formación continua

Tanto la OIT (Convenio 155, Recomendación 164) como los estándares ISO 45001 y OSHA reconocen la capacitación como deber fundamental del empleador.

En Estados Unidos, la norma 29 CFR 1910.1200(h) exige entrenar a los trabajadores en los peligros específicos de su entorno y verificar la comprensión del contenido.}

En Colombia, el Decreto 1072 de 2015 y la Resolución 4927 de 2016 establecen la obligación de formar a todos los trabajadores, incluyendo contratistas y temporales, dentro del Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo (SG-SST).

Estos marcos coinciden en algo esencial: la educación en seguridad no debe ser un evento aislado, sino un proceso continuo y adaptable.

Más allá del cumplimiento: la cultura del cuidado

Capacitar a quienes “siempre son nuevos” es una tarea exigente, pero también una oportunidad.  Cada entrenamiento es una semilla que puede salvar una vida, mejorar un entorno laboral y fortalecer la cultura preventiva de toda una organización.

Cuando las empresas entienden que la capacitación es una forma de cuidado y pertenencia, no solo cumplen la norma: construyen sostenibilidad humana y productividad.

Referencias

  • OIT (1981). Convenio 155 y Recomendación 164 sobre Seguridad y Salud de los Trabajadores.
  • OIT & OMS (2021). Joint Estimates of the Work-related Burden of Disease and Injury.
  • OSHA (2024). 29 CFR 1910.1200 – Hazard Communication Standard (h) Employee Training.
  • ISO 45001:2018. Sistemas de gestión de la seguridad y salud en el trabajo.
  • Ministerio de Trabajo (Colombia, 2015). Decreto 1072 de 2015 – Decreto Único Reglamentario del Sector Trabajo.
  • Ministerio de Trabajo (Colombia, 2016). Resolución 4927 de 2016 – Capacitación y formación en el SG-SST.
  • Knowles, M. (1980). The Modern Practice of Adult Education: From Pedagogy to Andragogy.

Articulo escrito por:

Janneth E. García Álvarez

Global Workforce Business LLC

Profesional Especialista en Sistemas de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo en empresas de manufactura, agroproducción, minería y servicios
Certificada OSHA 30h

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